lunes, 4 de noviembre de 2013

Carta de desamor


Aquí estoy, solo, como siempre, en la primera habitación a la derecha de este maldito lugar, pensándote, ¿cómo no?...; pensando en nuestra historia, esa que acabó hace apenas un año; recordando aquel pequeño despiste, esa camiseta que sigue conmigo en su sitio, en el segundo cajón de la triste mesita auxiliar que hay en esta habitación, donde guardo todas las cartas que nunca me atreví a mandarte.
No hay noche que no piense que dejé pasar a la persona perfecta que mi vida imperfecta necesitaba y cada vez veo más lejos aquellos recuerdos. La verdad es que Marwan tenía razón, la espina te recuerda que la belleza tiene un precio, y demasiado alto.
Me he pasado mucho tiempo buscando algún culpable para explicar lo que pasó y... es imposible. La cagamos tantas veces que cuando estábamos de acuerdo solo tuvimos una noche, nos habíamos hecho demasiado daño.
Y así siguió pasando el tiempo y seguimos echándonos de menos y pensando en qué cojones se nos había pasado por la cabeza cada vez que alguno de los dos volvía...
Pero todavía intento engañarme a mí mismo y decirme una y otra vez que no te quiero, que no me importas, que todo está bien... y... ¿para qué? Para darme cuenta de que no sirve de nada negar lo evidente. No quiero verte, no puedo verte más porque solo empeora las cosas, no puedo verte más porque solo hará que te necesite más, y te necesito demasiado...
Después de tanto tiempo cada vez que se apagan las luces, cada vez que mi mundo da un bandazo o cada vez que paseo por cualquier calle de esta jodida ciudad, no puedo evitar pensar en qué sería de nosotros en este preciso instante, si no hubiésemos sido tan niños.
El paso del tiempo solo me hace recordar una y otra vez cada error que cometí, cada beso que no te di y cada palabra que no te dije; el tiempo cada vez me hace sentir más culpable y más consciente de lo que perdí. Lo peor es que ya se me agotaron las salidas de emergencia y las esperanzas, que ya huí de todo esto demasiado y que no estoy en condiciones de volver a huir, ni puedo hacerlo lo suficientemente lejos.
Que he tenido muchas amantes desde entonces, pero como tú no encuentro ninguna.

Anónimo, 4º E.S.O. B