Como español que soy,
me halaga y alegra que mi lengua nativa, el español, esté creciendo a nivel
mundial. Cada vez hay más personas que se decantan o eligen aprender y hablar en
español, y eso en mí causa admiración.
Nuestro idioma crece, y
quiero pensar que también mejora en cuanto a calidad expresiva, tanto oral,
como escrita. Creo que esto puede influir de manera muy significativa en
nuestro país, dadas las circunstancias en las que nos encontramos, y en nuestra
cultura. Influir positivamente, claro está. Al fin se está descubriendo el
interés y el atractivo que despierta el español en el extranjero,
particularmente entre los jóvenes. Esto nos enorgullece a la vez que nos
responsabiliza de su cuidado, del uso que hagamos de él y de la preocupación
por conocerlo y transmitirlo a las generaciones futuras, al menos, como nos ha
llegado a nosotros.
Finalmente, espero que
las estadísticas y precisiones que se hacen cara al futuro sean ciertas y el
español llegue a estar en los peldaños más altos. Sin olvidar la amenaza y
peligro que acecha con el uso que de él se está haciendo, particularmente ,
desde los móviles, ordenadores...
Manuel Ferre
Viciana, 1º
Bachillerato (Naturales)