LA IMPORTANCIA DE LA BIBLIOTECA ESCOLAR
La importancia de la
biblioteca escolar radica en que sirve para acercar los libros a la comunidad
educativa y, de esa manera, favorece el gusto por la lectura. Por ello, el
objetivo principal de nuestra biblioteca es el desarrollo de la lectura en
las aulas, incentivando el préstamo de obras desde la propia biblioteca del
centro y proponiendo actividades que fomenten el gusto por la lectura, por la
escritura y, en definitiva, por los libros.
A través de este blog se darán
a conocer las actividades que, a través de la biblioteca escolar, se realicen
en el centro. Este espacio pretende ser un escaparate de todo
lo que ocurra en el centro y que tenga que ver con los libros. Serán expuestos
los trabajos de creación personal del alumnado, se convocarán certámenes
literarios, se publicará periódicamente una lista de recomendaciones de obras
interesantes, además de críticas literarias, actividades del día del libro o entrevistas a escritores.
Y para reflexionar sobre la
importancia de los libros os dejo con el discurso que dio Federico García Lorca
en el año 1931 con objeto de la inauguración de la biblioteca de Fuente
Vaqueros.
DISCURSO DE FEDERICO GARCÍA LORCA AL
INAUGURAR LA BIBLIOTECA DE SU PUEBLO.
“Medio Pan y un Libro”.
Alocución de Federico García Lorca al
Pueblo de Fuente Vaqueros (Granada). Septiembre 1931.
Cuando alguien va al teatro, a un
concierto o a una fiesta de cualquier índole que sea, si la fiesta es de su
agrado, recuerda inmediatamente y lamenta que las personas que él quiere no se
encuentren allí. ‘Lo que le gustaría esto a mi hermana, a mi padre’, piensa, y
no goza ya del espectáculo sino a través de una leve melancolía. Esta es la
melancolía que yo siento, no por la gente de mi casa, que sería pequeño y ruin,
sino por todas las criaturas que por falta de medios y por desgracia suya no
gozan del supremo bien de la belleza que es vida y es bondad y es serenidad y
es pasión.
Por eso no tengo nunca un libro, porque
regalo cuantos compro, que son infinitos, y por eso estoy aquí honrado y
contento de inaugurar esta biblioteca del pueblo, la primera seguramente en
toda la provincia de Granada.
No solo de pan vive el hombre. Yo, si
tuviera hambre y estuviera desvalido en la calle no pediría un pan; sino que
pediría medio pan y un libro. Y yo ataco desde aquí violentamente a los que
solamente hablan de reivindicaciones económicas sin nombrar jamás las
reivindicaciones culturales que es lo que los pueblos piden a gritos. Bien está
que todos los hombres coman, pero que todos los hombres sepan. Que gocen todos
los frutos del espíritu humano porque lo contrario es convertirlos en máquinas
al servicio de Estado, es convertirlos en esclavos de una terrible organización
social.
Yo tengo mucha más lástima de un hombre
que quiere saber y no puede, que de un hambriento. Porque un hambriento puede
calmar su hambre fácilmente con un pedazo de pan o con unas frutas, pero un
hombre que tiene ansia de saber y no tiene medios, sufre una terrible agonía
porque son libros, libros, muchos libros los que necesita y ¿dónde están esos
libros?
¡Libros! ¡Libros! He aquí una palabra
mágica que equivale a decir: ‘amor, amor’, y que debían los pueblos pedir como
piden pan o como anhelan la lluvia para sus sementeras. Cuando el insigne escritor
ruso Fedor Dostoyevsky, padre de la revolución rusa mucho más que Lenin, estaba
prisionero en la Siberia, alejado del mundo, entre cuatro paredes y cercado por
desoladas llanuras de nieve infinita; y pedía socorro en carta a su lejana
familia, solo decía: ‘¡Enviadme libros, libros, muchos libros para que mi alma
no muera!’. Tenía frío y no pedía fuego, tenía terrible sed y no pedía agua:
pedía libros, es decir, horizontes, es decir, escaleras para subir la cumbre
del espíritu y del corazón. Porque la agonía física, biológica, natural, de un
cuerpo por hambre, sed o frío, dura poco, muy poco, pero la agonía del alma
insatisfecha dura toda la vida.
Ya ha dicho el gran Menéndez Pidal, uno de
los sabios más verdaderos de Europa, que el lema de la República debe ser:
‘Cultura’. Cultura porque solo a través de ella se pueden resolver los
problemas en que hoy se debate el pueblo lleno de fe, pero falto de luz.